El polen es un nutriente conocido por sus propiedades benéficas para la próstata. Tiene la sorprendente facultad de regular las secreciones de las glándulas endocrinas, y aquí te contamos cómo aprovechar el polen para la próstata.
¿Qué es el polen?
El polen es la semilla macho que producen los estambres de las flores y está formado por partículas con un tamaño del orden del micrón (una milésima de milímetro).
Las abejas lo recogen en sus patas, en forma de bolitas de colores, después de recorrer cientos de flores. Esta es su presentación más habitual, bolitas de entre 0,5 y 2 mm. Lo único que se hace es secarlo, para poder conservarlo durante más tiempo.
En el mercado es posible encontrar polen fresco, polen molido y extracto de polen.
El polen para la próstata, su aliado perfecto
Más allá de hacer desaparecer los síntomas y la incomodidad tomando medicinas convencionales, algo que conseguirá gracias al polen, es tratar la causa subyacente por la que la próstata aumenta de tamaño. Y precisamente en este campo han tenido lugar importantes descubrimientos, gracias al estudio de los efectos terapéuticos de los pólenes de flores.
Tanto el polen, como la jalea real, el propóleo o incluso la propia miel, se conoce muy bien por sus numerosas virtudes para la salud. Actualmente el polen se encuentra entre los productos de la colmena que despiertan mayor interés entre los científicos.
La medicina conoce bien las causas de la hipertrofia de la próstata entre los hombres a partir de los 50 años. El problema es que los hombres, a medida que van envejeciendo, ven transformarse su testosterona en dihidrotestosterona (DHT), una sustancia que estimula el crecimiento de las células de la próstata.
Pues bien, el polen tiene la capacidad de impedir la formación de DHT, a la vez que aceleran la eliminación de la DHT y de sus productos derivados de las células de la próstata. Se han llevado a cabo estudios cruzados en doble ciego que han demostrado la utilidad del polen en la prevención y el tratamiento de la prostatitis y la hipertrofia benigna de la próstata.
Pero el efecto del polen no acaba aquí
Se ha demostrado que el polen tiene además, la capacidad de relajar los músculos que envuelven la uretra (el canal urinario) e inhibe el crecimiento de las células de la próstata. (1)(2). En un ensayo, consumiendo polen diariamente, (dos cucharillas de café colmadas) redujeron significativamente los síntomas en el 78% de los sujetos aquejados de una inflamación de la próstata. (3)
BIBLIOGRAFIA
1. Nakase K, et al. Inhibitory effect and synergism of cernitin pollen extract on the urethral smooth muscle and diaphragm of the rat. Nippon Yakurigaku Zasshi 1988 jun; 91: 385-92 (in Japanese).
2. Habib FK, et al. In vitro evaluation of the pollen extract, cernitin T-60 extract in the regulation of prostate cells growth. Br J Urol 1990; 66: 393-7.
3.Rugendorff EW, et al. Results of treatment with pollen extract (Cernilton N) in chronic prostatitis and prostatodynia. Br J Urol 1993; 71: 433-8.
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